La República

El primer presidente de la nueva república fue el general Juan José Flores, héroe de las guerras de independencia y representante de la clase conservadora de Quito. En 1833 estalló una guerra civil entre los conservadores de Quito y los liberales de Guayaquil, el primero de una larga serie de enfrentamientos entre las dos facciones, y que tuvieron como consecuencia la toma del poder por parte de tres destacados dictadores en la historia ecuatoriana: Juan José Flores; Gabriel García Moreno, dirigente del Partido Conservador; y el dirigente revolucionario Eloy Alfaro.

En medio de la lucha que sostuvieron los tres por el poder, se sitúa el período de presidencia del general José María Urbina, quien abolió la esclavitud. El presidente Alfaro, durante su segundo período de gobierno (1907-1911), introdujo una nueva Constitución de carácter liberal, dio un impulso muy importante a la construcción y desarrollo del ferrocarril y estableció la enseñanza laica y gratuita. Los gobiernos de 1916 a 1925 hubieron de hacer frente a graves problemas económicos. En 1928 se votó una nueva constitución.

Aunque en 1916 se solucionaron los problemas límitrofes con Colombia y el 29 de enero de 1942 Ecuador y Perú sucribieron un Protocolo con límite de forenteras, aunque subsitió el conflicto hasta octubre de 1998, cuando se firmó el Acta de Brasilia.

José María Velasco Ibarra ocupó cinco veces la presidencia, y sólo una terminó su período. Habiendo renunciado en 1961, fue sustituido por Carlos Julio Arosemena, que a su vez es derrocado por una junta militar en 1963. En 1966, tras sangrientos disturbios, la Junta Militar dimite y, después de un gobierno provisional de Clemente Yerovi Indaburu, se eligió presidente interino a Otto Arosemena. En 1968 fue elegido nuevamente Velasco Ibarra, que en 1970, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, asumió los poderes absolutos y abolió la consitución.

Derrocado en 1972, le sustituyó el general Guillermo Rodríguez Lara, que dimitió en enero de 1976, siendo reemplazado por el Consejo Supremo de Gobierno, presidido por el vicealmirante Alfredo Poveda Burbano.

En 1979 Jaime Roldós Aguilera asumió la presidencia, entrando en vigor la nueva Constitución. Un nuevo conflicto limítrofe en la frontera con Perú se cerró después de un arbitraje internacional en 1981. Dos meses después, Roldós murió en un accidente de aviación y el vicepresidente Osvaldo Hurtado Larrea pasó a ocupar la presidencia. En mayo de 1984, el hombre de negocios y candidato conservador León Febres Cordero le sucedió; su gobierno sofocó varios intentos de rebelión militar, el más importante de los cuales se produjo en enero de 1987, en el que el presidente fue secuestrado. Rodrigo Borja, del partido socialdemócrata Izquierda Democrática, ocupó la presidencia.

En 1992 le sucedió Sixto Durán Ballén, nacido y educado en Estados Unidos. Su mandato estuvo dominado por la contestación a la política económica de su gobierno, lo que provocó una huelga general en junio de 1994, y por el conflicto fronterizo con Perú.

Le sucede Abdalá Bucaram, elegido por una mayoría aplastante (venció en 20 de las 21 provincias del país) en la segunda vuelta celebrada el 7 de julio, tomó posesión el 10 de agosto. Bucaram, elegido fundamentalmente con el apoyo de las clases populares ecuatorianas con la promesa de incrementar el presupuesto nacional en lo que a gastos sociales se refiere, desarrolló sin embargo una política presupuestaria austera, que preveía grandes recortes a las subvenciones concedidas hasta ese momento en sectores clave de la economía nacional (electricidad, gas, gasolina, red telefónica). Todo ello, unido al gran número de excentricidades de todo tipo cometidas por Bucaram (conocido como 'el Loco'), condujo, a partir de enero de 1997, al inicio de una serie de movilizaciones y protestas políticas y sociales que llevaron a que el Congreso Nacional aprobara, el 11 de febrero, la destitución del presidente por incapacidad mental, para lo que servía la aprobación de tal resolución por mayoría simple. En su lugar, fue nombrado Fabián Alarcón, presidente del Congreso hasta ese momento. Tal resolución no fue aceptada por Bucaram, que la consideró un golpe de Estado. En tal estado de cosas, la vicepresidenta del país, Rosalía Arteaga, vino a complicar aún más la situación al autoproclamarse presidenta de Ecuador. El Ejército ecuatoriano intervino en la crisis presionando para que se llegara a un acuerdo que pusiera fin a la situación de interinidad creada. Finalmente, y tras largas conversaciones y acuerdos pactados e incumplidos, el Congreso forzó la retirada de Arteaga y votó a favor del nombramiento de Alarcón como presidente interino (para convertirse en presidente de forma legal era necesario modificar la Constitución). Bucaram, entretanto, optó por abandonar el país, rumbo a Panamá.

En 1998 fue elegido presidente el Doctor Jamil Mahuad, que fue derrocado a principios del año en curso. Actualmente el presidente de la República del Ecuador, es el Doctor Gustavo Noboa Bejarano.

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